Forgotten Words
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Halloween

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Mensaje por zoey Dom 16 Oct 2022, 12:39 pm

Título: Halloween
Autor: Zoey
Clasificación: Adulto
zoey
98

24/02/2015

zoey

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Halloween Empty Re: Halloween

Mensaje por zoey Dom 16 Oct 2022, 12:52 pm

HALLOWEEN


Cuando me corté el pelo no tenía ni idea de a dónde me llevaría. Esta es la historia de Kian, mi novio de la universidad, que tenía 24 años cuando yo tenía 23. Una historia de amor y pérdida. Explorar los límites, ampliar los horizontes, convertirse en personas completas. Tuvimos muchos Halloweens juntos, siempre disfrutando de las fiestas de disfraces, encontrar el único disfraz de pareja era la clave.

Ese año los dos estábamos perplejos hasta que entré con mi nuevo corte de pelo de cualquier manera. "¿Te gusta?"

"Estás guapísima, nena".

Tocando mi cabello "Es más corto de lo que pensé que sería."

"Te ves muy bien."

Hicimos el amor esa noche, nos abrazamos después, Kian dijo "Tengo una idea para nuestros disfraces de Halloween".

Lo miré esperando que me explicara su idea "Yo te vestiré de hombre, tú me vestirás de mujer, seguiremos las sugerencias del otro sin preguntas".

"Me toca disfrazarte a ti - COMO DIVERSIÓN".

Pasamos las siguientes semanas de compras, encontrando los conjuntos adecuados, buscando para Kian una peluca rubia y para mí una barba falsa. Jugué con su maquillaje para conseguir el aspecto adecuado, me enseñó a ponerme de pie, le afeité las piernas y el pecho, le encontré unos pechos falsos no demasiado grandes.

"Si yo llevo esto, tú llevas esto".

Entregándome un consolador realista de correa, color carne con bolas, sonrojada pero algo excitada. Lo sostuve mirando fijamente cómo se sentiría colgando entre mis piernas.

Me quité los vaqueros y los calzoncillos de chico, me puse las correas y lo subí.

"Tengo un pene". Acariciándolo juguetonamente, me sentí poderoso, Kian estaba mirando mi pene o mis pelotas. Parecía una puta cachonda con su maquillaje y su peluca rubia.

Terminamos de vestirnos, era una pieza caliente con su vestido negro y sus tacones, mi bulto se notaba en mis jeans. Nos miramos en el espejo, que pareja tan caliente, nos miraba.

Al llegar a la fiesta un pensamiento maligno cruzó mi mente cuando pasamos por un bar local. "Vamos a ver qué tan buenos son estos disfraces".
"Que"

" Entraremos aquí y coquetearemos con el sexo opuesto para ver si pasamos."

"Suena como una mala idea"

"Solo es un juego tonto si consigues que un chico te invite a una copa haré lo que quieras esta noche cuando lleguemos a casa"

"CUALQUIER COSA"

"Sí"

"¿El culo?"

"Si eso es lo que quieres, nena"

Entramos en el bar oscuro Kian fue a sentarse en un extremo de la barra yo fui a sentarme en el otro. Antes de que pudiera sentarme, una pequeña cosa rubia me agarró de la mano y me llevó a la pista de baile. Ella aplastó su culo contra mi bulto girando me besó su lengua entrando y saliendo de mi boca. Tal vez esto era una mala idea, pero me perdí en el momento.

la canción terminó y comenzó una lenta, mi pequeña rubia me echó los brazos al cuello, mis manos se dirigieron a su trasero enterrando mi cara en su cuello. Abrí los ojos y vi a Kian bailando con un tipo grande al otro lado de la pista. Me miró asustado porque las manos de su pareja recorrían su cuerpo libremente. Este tonto juego había ido demasiado lejos, tenemos que salir de aquí.

La cabeza me daba vueltas y mi pequeña rubia me llevó hacia el fondo del bar, hacia el baño. Sintiéndome atrapado tuve que follármela así que la tiré en la caseta empujándola contra la pared. Froté su húmeda raja, ella gimió de placer, sacando mi falso pene la guié dentro de ese caliente y húmedo coño. Ella se agitó salvajemente gritando "Más fuerte" "Más fuerte" Me la follé con todas mis fuerzas el sonido de sus orgasmos resonando en mis oídos. Me sentí poderoso, fuerte, y sorprendentemente también tuve un orgasmo.

Viví el otro lado y me encantó cada minuto, me había olvidado por completo de Kian. Salimos del baño dirigiéndonos de nuevo al bar la oí reírse al pasar por un pasillo "Otra reina de las mamadas".

Miré para ver a Kian en todo su esplendor, peluca rubia, tetas falsas, vestido negro, con esos tacones de aguja de rodillas devorando una polla. Le miré chupar la polla que tenía delante, el tipo agarrando la parte de atrás de su cabeza, hipnotizado ante el sitio. Viendo sus caderas agitarse, la cabeza inclinada, el cálido semen chorreando por la garganta de Kian.

Mi pequeña rubia susurrando "Soy mejor que eso".

Esperé fuera a Pete pensando en lo que había pasado. Cuando finalmente salió, caminamos en silencio. No a la fiesta de disfraces de Halloween sino de vuelta a casa pensando en lo que había pasado.

"¿He ganado?"

"Sí y algo más".

Al entrar en nuestro apartamento, estaba tan excitada que me puse de rodillas, tomando su hermosa polla en mi boca. Tan caliente chupando su polla, aún vestida como una puta rubia, sintiéndola crecer en mi boca. Me quité la ropa, mi culo era suyo, se lo había ganado.

Meneando su polla, trabajando mis jugos de mi coño a mi culo al mismo tiempo sabiendo lo que venía. Me giré presentando mi culo para su aprobación, él hurgó en mi entrada y yo empujé mi culo hacia su polla. Deslizándose más allá de mi grieta para llenar mis entrañas, me sorprendió lo bien que se sentía, él se movía lentamente, cada vez más profundo. Mi apretado culo se estiró para aceptar su polla de siete pulgadas, sólo hubo un ligero dolor cuando me llenó, pero que se desvaneció rápidamente en el placer.

Se retiró casi por completo y luego volvió a entrar, aumentando la velocidad y la potencia con cada empuje dentro de mí. "¡Fóllame el culo, rubia!" Fuera de control, disfrutando de esta nueva experiencia, empecé a moverme para seguir su ritmo, empujando de nuevo dentro de él, gimiendo y jadeando, grité "Fóllame el culo, nena". El golpeaba mi culo, como animales en celo, las experiencias de la noche bailaban en nuestra cabeza. Quería su semen caliente en mi boca para saborearlo recién salido de mi culo. La idea era sucia y excitante me giré devorando su polla el sabor extraño, punzante pero al mismo tiempo dulce.

Parecía que se hinchaba en mi boca mientras yo tragaba su polla, el vello púbico me hacía cosquillas en la nariz. Sus manos en mi pelo guiaban mis movimientos, mirando a la preciosa rubia que me follaba la cara, mi polla falsa aún colgando entre mis piernas, el primer chorro de semen caliente llenó mi boca. Otro chorro y luego otro, nunca se había corrido tanto, el semen goteaba por mi barbilla, miré hacia arriba con mis azules de bebé para encontrarme con sus hermosos ojos azules.

Levantándome lentamente, rodeé su cuello con mis brazos y lo besé, compartiendo nuestras bocas con su semen. Su lengua exploraba mi boca saboreándose con avidez. Perdida en el momento, acurrucada en su cuello, la rubia caliente susurró con voz femenina "Toma mi culo", fue entonces cuando noté que acariciaba mi polla falsa. "Mejor lubrícala primero".

Se arrodilló y tomó mi polla como una profesional. Chupando mi polla, con náuseas, se la metió hasta el fondo, acariciando su pelo rubio, girándola para que su hermoso culo quedara delante de mí. Entré en su culo lentamente, permitiendo que se adaptara, manteniendo la presión, vi cómo Kian se follaba su propio culo con mi pene, agitándose como la puta en la que le había convertido, llamándole con nombres que siempre me habían excitado.

Observé el juego visto, cuánto tiempo había deseado esto, necesitaba esto, cuánto había cambiado la vida este extraño Halloween. Vi su pequeño clítoris retorcerse y correrse mientras le follaba el coño del culo. Todavía estaba procesando lo que había sucedido, para dejar a un lado esos viejos miedos y complejos, encontrando nuevos placeres en el proceso. Nos trasladamos al baño para tomar una buena ducha caliente.

Enjabonando el cuerpo del otro, con el agua caliente brillando en nuestra piel, perdidos en el momento. Me sentía tan vacía que había probado el tabú del sexo anal y lo deseaba de nuevo. Llevé mi mano a su polla acariciándola suavemente y susurrando: "Tómame el culo otra vez, cariño". Creciendo en mi mano, sus dedos enjabonados encontraron mi culo deslizando uno y luego dos dentro de mi culo. Me giré apoyándome con las manos en la pared de la ducha y me incliné para presentar mi culo. Me penetró profundamente, gimiendo por el éxtasis de ser llenada de nuevo, agarrando un puñado de mi pelo mojado. Había encontrado lo mejor de ambos mundos. Golpeando mi culo, primitivo, "Llena mis entrañas" grité, él empujó tan profundo que ambos estallamos en orgasmos de nuevo. Su semen caliente se derramaba por mi culo y por mi pierna.

Había encontrado un nuevo y gran mundo al tener una nueva compañera de piso "Kiara" con la que me encantaba disfrazarme y putear y "Kian" mi maravilloso novio. Siempre habrá un vínculo especial cuando se comparte algo juntos por primera vez. Echo de menos esas noches salvajes con Kian/Kiara empujando las fronteras y explorando los límites.
zoey
98

24/02/2015

zoey

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